Mazatlán, el origen de la pesca de arrastre en Baja California Sur
25 Enero, 2023
Por Juan Luis García
Desde que Graciela llegó en octubre a la bahía de La Ventana en el Noroeste de México su vista hacia el mar ha estado marcada por la presencia de barcos camaroneros que van y vienen en la zona, pese a la creciente resistencia de ciudadanos locales.
“En estos tres meses que yo he estado los he visto, ponle que un mes y medio… normalmente, son desde dos a cuatro barcos camaroneros y pues se quedan dentro de la bahía tres o cuatro días máximo”, apunta la bióloga y fundadora de Kahal Bajasur, un proyecto de educación ambiental.
Si bien, la presencia de estas embarcaciones tiene mayores antecedentes, denuncias tuvieron lugar en el último trimestre del 2022 en contra de dichas embarcaciones, a quienes acusan de realizar pesca de arrastre, una técnica que toca el fondo marino con las redes, cuyos efectos son considerados perniciosos para el ecosistema por ambientalistas locales.
Causa Natura Periodismo tuvo acceso a una denuncia presentada ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) el 5 de diciembre por ciudadanos que han preferido guardar el anonimato.
En ella se señala a los barcos camaroneros Nelly, Norma Patricia y Maros X provenientes de Mazatlán como realizadores de pesca de arrastre que pone en riesgo a diversas especies de la bahía.
Una de las embarcaciones vista en la Bahía.
Foto: Incluida en la denuncia a Profepa
``Ya fueron denunciados por pescar tortugas carey y peces juveniles, y están afectando nuestros fondos marinos, teniendo consecuencias irreversibles para especies clave como sardinas, el pez gallo y picudos``, se lee en la denuncia.
La asesora ambiental Mariel Tejeda refiere que la pesca de arrastre que se realiza en la bahía y alrededores de Isla Cerralvo daña el medio ambiente y afecta, a su vez, a pescadores ribereños y a prestadores de servicios del área; al tiempo que acusa a estas naves de presentar fuga de hidrocarburos.
“Están pues matando tortugas carey que se ha documentado, arrecifes que están en listados en las normas 059 de Semarnat especies protegidas, entonces tienen un listado grande de ilícitos”, dice Tejeda.
La asesora ambiental argumenta que el llamado a que estos barcos se retiren de la zona se basa en el artículo 33 del reglamento de la Ley de Pesca.
Éste reza: “Queda prohibido el uso de redes de arrastre en bahías y esteros, excepto en aquellos casos que expresamente lo autorice la Secretaría oyendo la opinión del Instituto Nacional de la Pesca. Dicha prohibición se hará constar en la concesión, permiso o autorización que la Secretaría otorgue”.
Una solicitud de información entregada por la Conapesca a este medio apunta que la Bahía La Ventana es una bahía establecida, sin embargo, no está considerada como bahía bajo la norma NOM-002-SAGARPA/PESC-2013 que ordena el aprovechamiento de las especies de camarón en aguas de jurisdicción federal de México.
Nelly, otra de las embarciones vistas en Bahía La Ventana en el último trimestre de 2022.
Foto: Incluida en la denuncia a Profepa
Dentro de un listado de permisos vigentes con corte del 29 de agosto sólo se identificó a la embarcación Nelly de la empresa Pesca Asociada S.A. De C.V. localizada en Mazatlán, Sinaloa.
Este medio buscó la versión de la empresa, sin embargo, hasta el momento de cierre de edición de esta publicación no ha obtenido respuesta.
La pesca de arrastre
Al tocar los suelos marinos con las redes, la técnica de arrastre recolecta la fauna marina que encuentra a su paso, explicó Alejandro Olivera, representante en México del Centro para la Diversidad Biológica.
“Es muy destructiva, ¿por qué?, porque es poco selectiva, agarra todos los organismos que se encuentren y si bien hay mecanismos para dejar que especies como las tortugas y los peces puedan escapar, pues no todos pueden, no todos escapan y por los organismos que no se mueven, pues se quedan atrapados ahí”, expone.
Una de los indicadores que expertos han utilizado para medir el impacto del arrastre es la relación de captura de camarón y la fauna acompañante que queda en las mismas redes.
Una investigación realizada en el Golfo de California por el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste S. C., incluida en el reporte “Efectos de la Pesca de Arrastre en el Golfo de California”, sostiene que en la temporada 2004 al 2005 hubo una relación de 1 kilogramo de camarón capturado por cada 9.7 kg de otras especies atrapadas por pesca incidental.
“Para capturar un kilo de camarón, estás afectando prácticamente a 10 kilos de otras especies, es muy ineficiente, es como si vas a cosechar manzanas en un huerto y para ello tienes que hasta arrancar los árboles, los pájaros y las ardillas”, dice Olivera.
Según el estudio esta relación tan alta denota que existe pesca en zonas muy costeras, donde hay mayores concentraciones de peces, crustáceos y moluscos.
Sin embargo, el estudio hace hincapié en que a pesar de que la intensidad de camarón ha aumentado en la segunda mitad del siglo pasado, desde 1978 no lo ha hecho esta relación de captura de camarón y kilos de pesca incidental, por lo que el indicador es poco confiable para saber el impacto del arrastre en la fauna que vive en el suelo marino.
Un fenómeno estatal
La Ventana no es la única bahía en Baja California Sur donde hay pesca de arrastre. Alberto Guillén, director Operativo de la Red de Observadores Ciudadanos (ROC), apunta que en la Bahía de La Paz se utiliza esta técnica tanto por barcos camaroneros, como por embarcaciones menores conocidas como “changueros”, que adaptan sus artes de pesca para hacer arrastre del fondo marino.
La Red, entre otras cosas, realiza actividades de vigilancia para la protección y conservación de los recursos marinos de la Bahía La Paz.
“Lo principal es que en la Bahía de La Paz está prohibida la captura del camarón, sin embargo, muchos barcos se meten a escondidas, evadiendo los radares, porque ellos traen un radar a bordo que los monitorean desde Mazatlán”, dijo Guillén, en referencia al sistema de Monitoreo Satelital de Embarcaciones que por norma deben llevar las embarcaciones de altura.
El 30 de octubre del 2002 se publicó un aviso en el Diario Oficial de la Federación sobre la delimitación geográfica de la Bahía de La Paz y la prohibición del uso de redes de arrastre dentro la misma
Los barcos camaroneros no tienen permiso para estar en las bahías, salvo excepciones. En la imagen un barco en Mazatlán.
Foto: Víctor Hugo Olivas/ Cuartoscuro
El aviso designa a la Comisión Nacional de Pesca (Conapesca) como la institución encargada de velar por el cumplimiento de esta normativa. No obstante, Guillén no descarta que la pesca realizada en la bahía se dé bajo algún tipo de manto de impunidad.
“O hay un tipo de colusión entre inspectores; o se sienten amparados por alguna autoridad en La Paz que les dan el permiso, digamos; o se sienten protegidos para poder hacer el arrastre una o dos noches o lo que puedan”, detalló.
El director operativo comentó que es un problema que se ha registrado desde que empezaron a realizar monitoreos en el área en el 2009, al grado de ser uno de los motivos por los que se creó ROC.
“Todas las temporadas de camarón se van a encontrar de uno a cinco barcos que entran periódicamente a la Bahía de La Paz. Normalmente, sus horarios de entrada van desde las 11 de la noche a las 4 am. O sea todo lo hacen durante la noche justo para hacer una pasada por la costa, arrastran, limpian y en la mañana se quedan fondeados como si hubieran pasado ahí la noche o se retiran a fondearse en otro sitio, donde sí está permitido el arrastre”, dijo Guillén.
El capitán de ROC José Luis Ceseña, quien dirige las embarcaciones de vigilancia de la iniciativa, afirma que para los barcos camaroneros es posible sacar en una noche 500 kilos.
Un permiso para BCS
De acuerdo con una solicitud de información de la unidad de periodismo de Causa Natura, sólo existe un permiso comercial de pesca de arrastre para embarcaciones camaroneras de Baja California Sur, otorgado por cinco años a la embarcación 200 millas II el 9 de junio del 2021.
Un análisis de la Unidad de Datos de Causa Natura conforme a datos de Monitoreo Satelital de Embarcaciones (registros VMS), permisos y avisos de arribo, que por norma deben llevar embarcaciones de altura, revela que hubo 43 embarcaciones de pesca de arrastre procedentes de estados distintos a Baja California Sur que posiblemente pescaron en dicha entidad en 2020.
Al tratarse de permisos federales no se impide que embarcaciones de otras entidades acudan a las aguas de Baja California Sur en búsqueda de camarón.
Los datos apuntan a que hubo 6 mil 252 puntos de posible pesca realizada por barcos camaroneros en 2020, entendidos así con base al registro de las señales satelitales que reflejan una velocidad, profundidad y posición que sugiere que están pescando.
Un año después, en 2021, el cúmulo de embarcaciones creció 72.1% al alcanzar 74 embarcaciones foráneas en las costas de Baja California Sur y los puntos de posible pesca aumentaron 54.19% al llegar a 9 mil 640.
Vale decir que en 2021 al menos 57 de las 74 embarcaciones eran procedentes de Mazatlán, esto es el 77%.
Más vigilancia
Una petición de la organización Empty The Tanks en la plataforma Change.org pide la atención de la Profepa y la Conapesca sobre barcos camaroneros que han pescado en La Ventana, Punta Arenas y Boca del Álamo. Desde octubre ha logrado sumar 16 mil 847 firmas.
Tejeda comentó que se pretende crear un comité de vigilancia participativa en contra no sólo de la pesca de arrastre, sino de la pesca ilegal ribereña que ocurre por las noches.
Atrapar a un barco realizando arrastre en la noche es complicado debido a la tecnología con la que operan, explicó Guillén de ROC.
“Hay que ser muy estratégicos porque esos barcos traen radar, entonces en cuanto detectan una panga que va hacia ellos durante la madrugada, ellos lo que hacen es levantar inmediatamente y pueden salir mucho más rápido de lo que navegamos nosotros”, explicó.
No obstante, los esfuerzos de inspección y vigilancia ciudadanos abarcan todo tipo de pesca furtiva.
El capitán Máximo Valentín Pérez refirió que salen, de forma rutinaria, en las noches para buscar pescadores furtivos en la Bahía de La Paz. Sobre todo, se concentran en el ‘pistoleo’, una técnica con lámparas donde “se encandilan los cardúmenes (agrupación) de peces y no se mueven, y ahí nomás (buzos) los están agarrando”.
Estos pescadores ilegales capturan especies con restricciones como el perico, cabrilla y pargo, mientras que “hay otras especies que tienen sus temporadas en que las puedes trabajar, pero estos señores no las respetan”.
Se necesita a la autoridad
Ceseña refirió que, tanto para las acciones contra estos pescadores ribereños o pesca de arrastre, las actuaciones de ROC se limitan a la disuasión, ya que se necesita el acompañamiento de las autoridades de la Semar y Conapesca para levantar actas o realizar detenciones. En 13 años han logrado detener 12 pangas.
Si bien, la vigilancia en el mar es una herramienta clave, Olivera sostiene que sistemas automatizados podrían eficientar el control de la pesca de arrastre en áreas restringidas.
“El sistema perfecto, como funciona en Estados Unidos, es como las fotomultas…. Si detectan una embarcación metiéndose cinco metros a una zona prohibida no va a llegar la Guardia Costera. Le va a llegar la multa a la casa donde tienes registrada la embarcación por miles de dólares por haber cometido ese delito. Y si no paga, pueden perder la embarcación y su permiso”, dijo Olivera.
Barco camaronero en Mazatlán descarga captura realizada tras 4 días en el mar.
Foto: Víctor Hugo Olivas/ Cuartoscuro
En tanto los ciudadanos demandan la atención de las autoridades para atender lo que sucede en el mar.
Es el caso de Tejeda, quien por ahora se concentra en establecer un foro de diálogo con las autoridades de pesca “para hacerles saber todas las inconformidades y las ilegalidades que están permitiendo de los barcos industriales de Mazatlán”.
Ella se ha unido a cooperativas pesqueras del área para solicitar una reunión con la presidenta municipal de La Paz, Milena Quiroga, y el gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro Cosío; al tiempo que espera una respuesta de instituciones federales como la Profepa y la Conapesca.
La asesora ambiental espera que el diálogo impulse cambios legales que protejan la bahía. Si bien Isla Cerralvo es parte del Área de Protección de Flora y Fauna Islas del Golfo de California, existe un interés para ampliar la protección a la parte marina de la bahía.
Las embarcaciones camaroneras vistas en el último trimestre no han vuelto a la Bahía la Ventana en enero, pero en cualquier momento podrían volver sin un acuerdo con las empresas o la intervención de las autoridades.
“Lo que buscamos es que se proteja como un refugio y ojalá se declare como un Área Natural Protegida para que tenga mayor protección, pero bueno, como sabes eso depende más de la aceptación de la comunidad”, dijo Tejeda.
* Una solicitud de información entregada por la Conapesca a este medio posteriormente a la publicación de este reportaje apunta que la Bahía La Ventana es una bahía establecida, sin embargo, no está considerada como bahía bajo la norma NOM-002-SAGARPA/PESC-2013 que ordena el aprovechamiento de las especies de camarón en aguas de jurisdicción federal de México. Esto fue agregado al texto original del reportaje.